Trabajar más de 55 horas semanales aumenta hasta en un 40% las probabilidades de tener problemas en el corazón o un derrame cerebral.
Esto es lo que sugiere un estudio de la University College de Londres que contó con la participación de 85.000 hombres y mujeres. En el estudio se encontró que los voluntarios superaban las 55 horas y su jornada normal variaba entre 35 y 40 horas. Por cada 1.000 personas en el estudio, se contabilizó un extra de 5,2 casos de arritmia entre aquellos que se excedían en comparación a quienes hacían turno normal.
Según el director médico de la British Heart Foundation, Nilesh Samani, aunque sabemos que algunos de los factores que provocan las arritmias cardiacas, tales como la edad, la presión arterial alta, el estado de las válvulas del corazón y el exceso de consumo de alcohol, muchos pacientes desarrollan la condición sin una causa obvia. “Es importante tener en cuenta este estudio, ya que demuestra que las arritmias podrían estar no solo ligadas a estos factores, sino también a los turnos laborales”, dijo.
En contexto. Científicos australianos han identificado cuál es el máximo de horas recomendadas para trabajar sin poner en riesgo la salud, según informó la página web de la Universidad Nacional de Australia.
En su estudio, publicado en la revista Social Science & Medicine, los investigadores aconsejan no trabajar más de 40 horas a la semana para mantener un estilo de vida saludable. Superar este límite puede generar alteraciones de la condición mental y física del trabajador, debido a que no le prestan atención a sus necesidades, en especial a la nutrición y la higiene.