Diversos estudios han revelado las actividades que debes hacer para poder deshacerte de esos kilos de más.
En el intento de perder peso, todas hemos terminado por probar, muchas veces sin éxito, algunas dietas o rutinas de ejercicio bastante populares. Sin embargo, si lo que quieres es verdaderamente deshacerte de esos molestos kilos de más, la ciencia podría tener las claves.
Tal es el caso de las dietas estrictas que prometen hacerte perder peso, pero que finalmente terminas por abandonarla al poco tiempo y consigues el efecto contrario. Un estudio realizado por el departamento de Psicología de la Universidad Dexler en Filadelfia, demostró que quienes se someten a estas dietas terminan con más problemas de sobrepeso.
Come más proteínas. Las proteínas de los alimentos son beneficiosas para bajar de peso, pues aceleran el metabolismo y aumentan la sensación de saciedad, por lo que se puede disminuir hasta 400 calorías al día, según un estudio de la American Society for Clinical Nutrition.
Engaña a tu cerebro. Hay distintos trucos para tener una sensación de saciedad más rápidamente y comer menos. Uno de ellos es que el cerebro cree que se debe comer todo lo que está servido en el plato, por lo que al reducir la porción terminarás por sentirte más llena, de acuerdo a un estudio de Cornell University en Nueva York.
Más saludable, menos procesado. Otra clave para bajar de peso es dejar los alimentos procesados y optar por lo cien por ciento natural. Para lograrlo, compra tus propios ingredientes (frutas, verduras, carnes, huevos y más) e intenta cocinar en casa cada vez que puedas.
Planifica tus comidas. Organiza tus comidas semanales en base a los ingredientes que comerás. Planifica ingerir todos los nutrientes necesarios y haz una lista de compras de acuerdo a ello. No dejes los platos al azar, pues es ahí donde puedes perder de vista tus objetivos.
Toma mucha agua. Los principales beneficios de beber agua son, en primer lugar, que beneficia el buen funcionamiento del metabolismo, por lo que ayuda a quemar más calorías. Y, además, que al tomarla antes de las comidas, aumenta la saciedad pues ocupa un mayor lugar en el estómago, reveló un estudio del Instituto de investigación del Hospital de Oakland.
Deja las bebidas con calorías. Una de las principales fuentes de calorías son los refrescos como gaseosas, alcohol, jugos envasados, entre otras bebidas azucaradas. El problema con estas calorías son que no aportan ningún tipo de nutrientes. Un estudio de la Universidad de Purdue en Estados Unidos demostró que estas bebidas son una de los principales causas del sobrepeso.
Olvídate de las dietas estrictas. El problema es que al ser un estilo de alimentación muy diferente al que se tiene normalmente, las personas no suelen seguirlas por mucho tiempo y abandonan. Un estudio realizado por el departamento de Psicología de la Universidad Dexler, en Filadelfia, demostró que quienes se someten a estas dietas terminan con más problemas de sobrepeso.