jueves, 7 de diciembre de 2017

Prevenir la anemia ayuda a combatir las enfermedades respiratorias

La deficiencia de hierro afecta la capacidad de una adecuada respuesta inmune, lo que hace que los menores sean propensos a infecciones.


La anemia afecta a cerca del 40% de los niños peruanos menores de 3 años. Pero, ¿cómo afecta esto a su salud respiratoria? La deficiencia de hierro afecta la capacidad de una adecuada respuesta inmune y por ende, de resistencia a las infecciones.

Estudios internacionales revelan que los niños con anemia tienen mayor frecuencia de infecciones respiratorias bajas, es decir, infecciones traqueales, bronquitis, bronquiolitis y sobre todo, neumonía, que es considerada como la principal causa de muerte en niños menores de 5 años alrededor del mundo.

Son muchos los estudios que encuentran a las personas anémicas más predispuestas a padecer infecciones respiratorias, atribuyéndole un riesgo de 3 a 5 veces más de presentarlas. Estos estudios encuentran un mayor riesgo con niveles de hemoglobina menor a los 10mg/dl.

Estos niveles bajos de hemoglobina afectan el transporte normal de oxígeno a los tejidos, lo que produce que las personas anémicas afectadas por infecciones respiratorias como neumonía, tengan mayor dificultad respiratoria y cuadros más severos.

Existen otros factores claramente asociados a esta mayor frecuencia de infecciones respiratorias como el bajo estatus socioeconómico, hacinamiento, poco acceso a programas de vacunación, contaminación domiciliaria (como exposición a cocinas a leña o kerosene y tabaquismo) y pobre ventilación, así como la malnutrición, falta de lactancia materna y otras deficiencias nutricionales que son comunes a la aparición de anemia.

Prevención

Además de estrategias como la vacunación y el apoyo nutricional, estas infecciones respiratorias pueden prevenirse con medidas de prevención y detección precoz.

La lactancia materna exclusiva ha demostrado ser una medida preventiva efectiva. Lleve a su niño a sus controles periódicos sobre todo si lo nota decaído, cansado, pálido, poco activo o somnoliento. Es crucial la prevención de la anemia y el diagnóstico temprano para evitar sus amplias consecuencias.