Tenemos una excelente noticia: la cerveza además de calmar la sed, ser rica, refrescante y el acompañamiento ideal para cualquier reunión entre amigos, si se bebe con moderación, puede generar beneficios en nuestra salud gracias a sus principales ingredientes: agua, cebada y lúpulo.
Existe un sinfín de variantes de cerveza con una amplia gama de matices, debido a las diferentes formas de elaboración y a los ingredientes utilizados, pero todas si se beben en su justa medida, pueden prevenir algunas enfermedades y aportar beneficios a nuestro organismo. ¡Conozcamos ya mismo de cuáles se trata!
Beneficios de la cerveza para la salud
Previene infartos
Un estudio realizado por científicos italianos y publicado en la revista European Journal of Epidemiology, constató que las personas que toman cerveza con frecuencia (al igual que el vino tinto) tienen un 42% menos de riesgo de sufrir alguna enfermedad cardíaca, debido a que contiene polifenoles, antioxidantes naturales que protegen al cuerpo de cualquier enfermedad cardíaca.
Diversos estudios también demostraron que ayuda a elevar los niveles de HDL, el llamado «colesterol bueno» que ayuda a prevenir que las arterias se tapen.
Nutrientes necesarios
La cerveza contiene elementos nutritivos, como vitaminas del grupo B (importantes para el funcionamiento del sistema nervioso, para el cerebro y la regeneración de las células), ácido fólico, magnesio, calcio, fibra soluble y polifenoles (antioxidantes).
También presenta otras sustancias no nutritivas, pero que también aportan a la fisiología del organismo, como son la fibra y los antioxidantes, que provienen de una planta (lúpulo) que se añade a la cerveza durante su elaboración.
Huesos más fuertes
Un estudio realizado en 2009 en la Universidad de Tufts constató que los hombres y las mujeres de más edad que bebían una o dos bebidas al día, tenían una mayor densidad ósea, gracias a que la bebida tiene altos niveles de silicio, que está vinculado a la salud de los huesos.
También tiene fitoestrógenos, asociados a la prevención de la osteoporosis, por lo que algunos estudios señalan que la cerveza mejora la salud ósea.
Cuida tus riñones
Un estudio realizado por el Dr.Tero Hirvonen de la Universidad de Oxford, demostró que las resinas de lúpulo permiten eliminar los depósitos de calcio al nivel de los riñones, lo que reduce el riesgo de cálculos renales.
Además, la cerveza tiene un efecto diurético, por lo que la eliminación de cálculos es aún más fácil. Eso sí: el consumo excesivo de alcohol, favorece la aparición de cálculos renales.
Ayuda a prevenir el alzhéimer
Un informe del Centro de Información Cerveza y Salud concluyó que el consumo moderado de cerveza puede disminuir uno de los factores de riesgo de la enfermedad de Alzheimer, gracias a su alto contenido en silicio, el cual reduce la biodisponibilidad de aluminio en plasma y tejido cerebral, un metal potencialmente neurotóxico asociado diversas enfermedades neurodegenerativas.
Si bien el consumo de cerveza se asoció popularmente con la «barriga cervecera» un grupo de investigadores del Departamento de Metabolismo y Nutrición de Madrid, sostiene que no es más que un mito, ya que por el momento no se ha comprobado relación entre el consumo moderado de cerveza y la aparición de obesidad abdominal.
Además, la aportación calórica de la cerveza es muy baja: un vaso de 200 ml tiene solo 90 kcal, por lo que la bebida no es culpable de la obesidad y sí lo son una alimentación desequilibrada, la falta de ejercicio y, en algunos casos, la información genética.