Aunque resulta bastante útil, sobrecargar nuestro bolso puede desencadenar dolores de espalda y hombros.
¿Cuántas veces has salido de tu casa con un bolso grande y pesado? Entre la billetera, los lentes, el neceser de maquillaje, la agenda diaria y algunos otros básicos del día a día, nuestra cartera termina asemejándose a una maleta de viaje. Lo peor: ignoramos el daño que nos causa.
Por eso, aunque los bolsos voluminosos se han puesto de moda en los últimos años -y resultan muy útiles para las mujeres que llevamos una agenda apretada-, debemos tener en cuenta que su uso puede causarnos dolores en la espalda, hombros y hasta contracturas en el cuello.
Dolor de espalda. Llevar una cartera pesada todos los días genera un cambio en el modo de caminar, pues sueles inclinarte hacia un lado debido al peso. Por ello, puedes sufrir dolores de espalda constantemente, incluso puede afectar tu postura.
Mala postura. Como se mencionó anteriormente, llevar un bolso pesado causa una mala postura a largo plazo. ¿La razón? Cuando el cuerpo lleva una postura repetidas veces, suele acostumbrarse y adaptarse a ella. ¡Cuidado!
Dolor en el hombro. Llevar un bolso en el mismo hombro siempre desencadena una serie de dolores en esta parte del cuerpo. Para aminorar el dolor, se recomienda distribuir bien el contenido del bolso y realizar masajes constantemente a las áreas afectadas.
Contracturas en el cuello. La espalda y los hombros no son las únicas víctimas, el cuello también se lleva una mala parte en esta situación. Un dato: el peso de tu bolso no debe exceder el 10% de tu propio peso.
Dolor de cabeza. Debido a la presión que se da sobre los hombros, la espalda y el cuello, algunas mujeres llegan a sufrir fuertes dolores de cabeza. Aunque todos estos dolores son temporales, pueden aumentar con el tiempo. ¡Intenta cambiar tu hábito y lleva un bolso menos pesado!