miércoles, 14 de marzo de 2018

¿Tomas siesta?: Encuentra aquí siete buenas razones para hacerlo

Dormir por unos 20 o 30 minutos después de almorzar tiene varios beneficios para ti. Además de recargar energía para el resto del día, mejora tu estado de ánimo. Aquí te contamos más.


Aunque vivimos en constante lucha contra el tiempo, en que cada minuto libre cuenta, hay hábitos que no deberíamos dejar de lado por ser saludables. Tomar una siesta es uno de ellos. Este descanso consiste en dormir por 20 o 30 minutos luego de almorzar para recargar energía y facilitar la digestión, comenta el médico neurólogo César Saavedra, de la Clínica Ricardo Palma.

¿Sabías que la siesta disminuye el estrés y el riesgo de padecer males cardiovasculares? Esto es posible porque al dormir -explica el médico neurólogo Carlos Lizárraga- liberamos la hormona de crecimiento, que funciona como antídoto del cortisol (hormona del estrés). Además -añade- estimula el sistema inmunológico, reduce el estrés y la ansiedad, ayuda a reparar los músculos y a perder peso.

En los últimos cien años, debido a las condiciones de vida, hemos perdido unas dos horas diarias de sueño. Por eso, explica el médico neurólogo Carlos Lizárraga, tomar una siesta podría ayudarnos a recuperar el sueño perdido y asegurarnos un ritmo de vida más sano por sus beneficios físicos y mentales.

Una buena siesta dura 20 o 30 minutos y se toma luego de almorzar para recargar energía y facilitar la digestión, detalla el médico neurólogo César Saavedra, de la Clínica Ricardo Palma. "Diversos estudios demuestran que el período de mayor somnolencia se da entre las tres y cinco de la tarde; además, los ritmos circadianos sufren una caída en ese momento del día", comenta Carlos Lizárraga, médico neurólogo de la Clínica Internacional.

Elige un lugar cómodo, ventilado, sin ruido ni luz para tomar la siesta y tener un descanso reparador, recomienda el médico Saavedra. Si presentas molestias gástricas (reflujo, por ejemplo), es mejor descansar en un sillón (sentada) antes que en la cama, pues la posición horizontal aumenta las molestias, comenta el doctor Lizárraga. 

Un estudio de la Universidad de Berkeley (EE.UU) asegura que quienes duermen la siesta rinden más por las tardes y aumentan en un diez por ciento su capacidad de aprendizaje, comenta el doctor Carlos Lizárraga. "El sueño permite afrontar nuevos conocimientos y fijar los ya adquiridos", anota.

Si necesitas dormir la siesta por más tiempo y, pese a ello, tu sueño nocturno es normal (no tardas en dormir), quizá presentas un trastorno de sueño, depresión u otro problema que debes consultar con el médico, observa el doctor Carlos Lizárraga, médico neurólogo de Clínica Internacional.

Existen numerosos estudios -explica el médico neurólogo Carlos Lizárraga- que demuestran que la siesta (incluso de seis minutos) contribuye a mejorar cualquier tarea que suponga recordar listas de palabras o de objetos. "Durante el sueño, los recuerdos recientes se transfieren del hipocampo al neocórtex, nuestro disco duro, donde se consolidan los recuerdos a largo plazo", recalca.

La siesta aumenta la creatividad. Un equipo de neurólogos de la Universidad de Georgetown ha comprobado que este descanso vespertino estimula la actividad de la zona del cerebro (hemisferio derecho) asociado con esta capacidad, refiere el doctor Lizárraga. Ahora que sabes todo esto ¿te animas a tomar una siesta?