miércoles, 6 de junio de 2018

Dormir siesta y otros 4 errores que pueden estar robando tus energías aunque no lo creas

¿Por qué te sientes cansada y sin energía? Es probable que la respuesta esté en la calidad de tu sueño. Dormir bien es vital para el correcto funcionamiento del organismo. Además, es la única manera de disfrutar más de tu trabajo, tus pasatiempos y de tus vínculos personales.


Por eso, te invitamos a que conozcas y descubras aquellos hábitos que deberías reconsiderar en tu vida para sentirte plena y atractiva todo los días.

¿Qué NO hacer para dormir bien?
Ten presente que tu calidad de sueño podría ser aún peor si realizas cualquier de estos hábitos:

Usar el celular antes de acostarse y colocarlo cerca de la cama
Colocar el móvil tan cerca de tu espacio de descanso está asociado a los problemas de sueño y hasta el dolor de cabeza, según un estudio del Departamento de Salud Pública de California. Por eso, trata de apagarlo por lo menos una hora antes de ir a dormir.

Retardar el horario de sueño
Cuando llegas a casa luego de una larga jornada, es momento de relajarse un poco y hacer lo que te gusta. Lo que no es recomendable, sin dudas, es llenarte de actividades o de pasatiempos y olvidarte de ir a dormir a un horario razonable.

Abusar de la cafeína
A todos nos encanta el café; es uno de los placeres más lindos. Pero abusar de esta bebida, sobre todo por la tarde o la noche, no favorece nuestra calidad de sueño.
Comer mucho en la cena
Procura evitar los platos demasiados pesados o ricos en grasa y embutidos por la noche. Lo recomendable es cenar alimentos de fácil digestión como sopas, pastas o yogur.

Tomar siestas durarderas
Si puedes tomarte un descanso por la tarde, eres afortunado. Sin embargo, tampoco es bueno abusar del sueño en ese horario. Si duermes más de 20 minutos, no podrás conciliar el sueño durante la noche, momento en el que realmente necesitas descansar y desconectarte.
Debes organizar el día de tal manera para al menos dormir de 6 a 8 por día. Si no descansas lo suficiente, serás más proclive a sufrir enfermedades cerebrales o cardiovasculares.