lunes, 5 de febrero de 2018

¿Quieres bajar de peso? ¡Hazlo tomando vino!

El vino es maravilloso desde todo punto de vista, no solo se trata de la bebida elaborada por el hombre más vieja del mundo, o una de las más sabrosas de la historia, también esconde propiedades que —siempre y cuando sea bebido con moderación— son altamente saludables para el cuerpo, incluso pueden ayudar a perder peso.


Para muchas personas, adelgazar, sea por motivos de salud o por razones estéticas, puede ser uno de los más grandes desafíos. Ahora, gracias al vino y a un médico que defiende una dieta a base de esta bebida, dicha lucha contra los kilos extras podría hacerse más fácil y llevadera.

El vino tinto está compuesto, entre otras cosas, por el piceatannol, una sustancia excelente para disolver grasas, ayuda a que las células grasas no se sigan formando y por si fuera poco, también debilita a las ya formadas.

De paso, el piceatannol también favorece la digestión, lo que ayuda el organismo a eliminar las toxinas de la comida y sintetizar nutrientes de forma más efectiva. Es decir, si lo usamos correctamente, el vino tinto es un gran aliado…

Por eso, el especialista en nutrición Rubén Bravo, integrante del Instituto Médico Europeo de la Obesidad, se tomó la libertad de crear una dieta que basándose en el vino, nos permitirá bajar hasta 6 kilogramos.

¡Cuidado! Antes de realizar la dieta, debes consultar a un nutricionista. No te olvides de que las dietas funcionan distinto en cada persona, conforme su metabolismo, y muchas provocan el temido efecto rebote.

Cómo funciona la dieta del vino
Desayuno
La dieta propuesta por Bravo es hipocalórica, es decir, con pocas calorías. En este sentido, se sugiere un desayuno compuesto por dos rodajas de pan integral, un huevo, jamón y fruta. Entre de las frutas, es importante evitar el mango y todas aquellas demasiado calóricas, como la banana o el caqui también. Para acompañar, se recomienda una taza de café descafeinado.

Almuerzo
Es en el almuerzo que entra en juego el vino. Se recomienda tomar 150ml de vino tinto, acompañado por una porción de carne o pescado. Las verduras pueden ser consumidas sin problemas como guarniciones, lo único que se debe evitar el pan.

Cena
En la cena podemos excedernos un poco más y beber dos copas de vino —300ml, aproximadamente— mientras disfrutamos de una rica sopa de verduras o pollo, acompañada de un poco de carne o mariscos.