Las bajas temperaturas son las causantes de varias enfermedades que afectan a nuestro organismo.
Con la llegada del invierno, muchas personas comienzan a sentir dolores en las articulaciones y los huesos. Las contracturas y las roturas de fibras musculares también son algo frecuente. La explicación la tiene el termómetro: las bajas temperaturas son causantes de varias enfermedades que afectan a nuestro organismo.
El traumatólogo Francisco Cozar, señala que con el frío los músculos se contraen y las articulaciones se vuelven rígidas, sobrecargadas y dolorosas, lo que puede acentuar lesiones y molestias que impiden que nos movamos como quisiéramos. El frío también deteriora los cartílagos, lo que explica la aparición de la temida artrosis.
“Las zonas más afectadas generalmente son los dedos, los pies y el cuello. Esto se debe a que allí la grasa no abunda”, explica.
Los más perjudicados. Esta exposición al frío es más dañina en niños menores de 12 años y en personas mayores de 60, donde la circulación de la sangre todavía no es plena o, en el caso de los mayores, dejó de serlo.
Por esta razón es necesario evitar exponerse al frío utilizando ropa abrigada y guantes que generen calor de forma homogénea o evitando salir cuando las temperaturas sean más bajas de lo habitual. Otra forma de prevenir es haciendo ejercicio de manera regular, ya que esto ayuda a mantener las articulaciones activas.